Llega otro 25 de noviembre y no
podemos decir que la violencia contra las mujeres haya disminuido ni que el
número de mujeres asesinadas, por el mero hecho de ser mujeres, sea menor que
en años anteriores.
Consultando los datos que nos
aportan las organizaciones de mujeres, nos encontramos con el escalofriante
dato de 89[1]
mujeres asesinadas por un hombre en el Estado Español, de las cuales 48
lo han sido a manos de su pareja o ex pareja.
Respecto a los y las menores 8 han sido asesinadas, 6 a manos de su padre y 2 de su
padrastro.
Desde 1999, 1.116[2]
mujeres han sido asesinadas por parte de su pareja o expareja, según las mismas
fuentes.
Son datos desoladores que exigen
medidas urgentes de actuación para la prevención, atención y erradicación de la
violencia contra las mujeres.
Este 7 de noviembre hemos vivido
un hecho histórico con la convocatoria en Madrid realizada por 700
organizaciones feministas del Estado en contra de las violencias machistas, y
para que esta realidad sea considerada una cuestión de estado.
Las feministas y la sociedad
civil se movilizaron en contra de una realidad sangrante que es necesario
termine ya. Y pidieron al gobierno central y los gobiernos autonómicos que se
reconozcan todas las manifestaciones de la violencia machista (no sólo la
perpetrada por parte de la pareja o expareja) y exigieron medidas para su
erradicación.
Desde Emakumeok Bidean
acompañamos esa movilización, entendemos al igual que el movimiento feminista
que no hay sólo una violencia, sino que la manifestación de dicha violencia
tiene diferentes caras y se da en todos los ámbitos sociales, tal y como apuntamos
en otro manifiesto.
Y que su erradicación ha de ser un punto prioritario en las agendas políticas.
Es importante nombrar y
visibilizar estas violencias y sus manifestaciones para que no se normalice, para
que las mujeres y las jóvenes independientemente de su condición, clase
social, procedencia, origen étnico, religión, diversidad sexual o funcional la
identifiquen y digan no a la violencia desde la dignidad y la libertad,
pidiendo justicia y reclamando sus derechos. Sin miedo. En definitiva convirtiéndose en
sujetos políticos del cambio social necesario para una sociedad más justa, donde mujeres y hombres viven en igualdad de
condiciones.
Las organizaciones que formamos
parte de Emakumeok bidean estamos en ese camino de transformación
social, apoyando y acompañando la autonomía de las mujeres y jóvenes, y la toma
de conciencia que supone ser mujer en una sociedad patriarcal. Ojalá más
organizaciones y más personas, mujeres y hombres, se sumen a este bien común,
por un mundo más justo y libre de violencias.
ENTIDADES FIRMANTES: Asociación
Susterra, Asociación Educativa Berriztu, Suspergintza Elkartea, Asociación
Zubietxe, Fundación Social Ignacio Ellacuria, FEKOOR, Bidegintza.